Dos gotas de agua

Son los hombres y mujeres
como dos gotas de agua,
que llovidas en la Tierra,
vida dieron con sus almas.

Son los hombres y mujeres
criaturas de la patria,
engendradas con amor,
y alentadas en España.

Son los hombres y mujeres
seres vivos de la raza,
que hoy domina en mi mundo,
con sus quites y sus faltas.

Son los hombres y mujeres
sexos ambos de alternancia,
en la cría de los hijos,
en la unión de democracia.

Son los hombres y mujeres,
los que rigen las finanzas,
que países configuran,
en familias y alianzas.

Son los hombres y mujeres
de la Biblia las estatuas,
que pecaron inocentes,
por probar nueva sustancia.

Son los hombres y mujeres
de Dios hijos semejanzas,
con la Virgen como madre,
y Jesús como esperanza.

Entre hombre y mujeres
roces hay sin tolerancia,
en dispares religiones,
con violencia desde infancia.

Religiones extremistas,
condenando a las muchachas,
con las ropas y los velos,
que por miedo no destapan.

Son los hombres y mujeres
los que juntos más avanzan,
igualados en derechos,
y en deberes sin retranca.

Son los hombres y mujeres
los consortes de las casas,
los abuelos, los pequeños,
los propuestos del mañana.

Son los hombres y mujeres
tolerantes quiénes ganan,
más prosperan y aprovechan,
los avances y programas.

En empresas efectivas,
en industrias de alta gama,
hay señoras y señores,
responsables con sus canas,
competentes con estudios,
sin prejuicios ni estampas,
que entre sexos discriminen,
con los tópicos de España.

Son los hombres y mujeres
como dos gotas de agua,
en las mentes es patente,
la teoría darwiniana.