MARISOL

Qué decir de Marisol,

niña fue idolatrada de televisión.

Qué decir de Marisol,

niña que encandilaba con su arte y pasión.

Niña guapa y lozana,

sin vergüenza ni rubor,

su valía se ganaba,

actuando con clamor.

Según años que pasaban,

artista se hizo de honor,

con su cante de gitana,

con su asombrosa voz.

De Málaga oriunda,

de humilde condición,

hija era la mediana,

y el flamenco su pasión.

Estrellato que cruzaba,

las fronteras de nación,

su edad era temprana,

para tal explotación.

El mundillo la empujaba,

a dejarse el sudor,

en películas de fama,

que causaban estupor.

Las estrellas tan tempranas,

de esos tiempos propició,

aprovechamiento injusto,

de quien cerca las trató.

Mal pagada en ocasiones,

como fue “El Ruiseñor”,

ella poco se quejaba,

no mostraba su rencor.

Y creciendo le cambiaba,

esa voz que dio amor,

y el mundo de la imagen,

se hizo suyo sin opción.

Ya mujer daba la talla,

muy versátil, con color,

en las series que dotaba,

de su nata condición.

Sus principios explotaron,

al marxismo se adhirió,

de manera espontánea,

contra toda predicción.

Comunismo fue su causa,

quizá hastiada del atroz,

modo de vida llevada,

desde niña a mayor.

Qué decir de Marisol,

niña fue en esa España,

prodigiosa, anterior,

con su estampa divulgaba,

el flamenco al exterior.

Que excitó los sentimientos,

y a gente emocionó,

como hito que cantando,

su figura presentó.

Pero ahora ya “anciana”,

del pasado renegó,

no quiere más “campanadas”,

ni un segundo de perdón.

A los medios les deniega,

ir soñando al plató,

más o menos bien pagada,

con su grande discreción.

Se comprende su postura,

y su obvia opinión,

ya vivió en las alturas,

y hastiada ya bajó.

Su figura en España,

no se acaba de afición,

sus películas recuerdan,

unos tiempos de esplendor.

Pepa Flores recordada,

por la gente, con amor,

ella cantando ganaba,

su leyenda posterior.

Qué decir de Pepa Flores,

qué decir de Marisol,

ella marca estos versos,

soberana como el sol.