Tu
vida perdura, niñito del alma,
memoria
de madre, memoria de España,
memoria
de todos los que te amaban,
memoria
de Níjar conmocionada.
Pescaíto
risueño, chicuelo Gabriel,
inocente,
pequeño, al Cielo va él,
su
sino tremendo, su suerte la fe
en
Cristo y María, en Dios de Israel.
Risueño
en la foto, con sueños de bien,
su
crimen tragedia de mujer cruel,
por
ti España entera de luto se ve,
lloramos
la pena del niño Gabriel.
Atroces
secuelas, injusticia se ve,
Gabriel
así nos deja cogiendo su tren,
los
vivos en tierra, Gabriel donde esté,
esto
es una pena que hay que esclarecer.
La
novia del padre, ¿qué hizo?, ¿qué?,
España
ofendida, el mundo de bien;
mas
ya en el Cielo nos mira Gabriel,
lloremos,
rabiemos, suframos por él.
Y
así esto pasa, vivimos al bies,
un
caso tremendo, un crimen cruel,
secuestro
del alma, un pez se nos fue
al
mar de los Cielos, con Dios en la fe.
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