domingo, 25 de febrero de 2018

LUCÍA Y ERNESTO 1ª ENTREGA


INTRODUCCIÓN

Sor Socorro, aquella misma noche, que le había inducido a reflexiones tan profundas como determinantes, quedó convencida de la decisión que debía tomar irrevocablemente: colgaría los hábitos que tanto le había costado alcanzar en aquella hermandad religiosa, por la que durante dos años hubo de guardar sus normas y criterios con absoluta sumisión.

Aún era joven, y su amor, con titánica estoicidad, le había sido fiel frente a sus dudas existenciales durante ese período de tiempo transcurrido en el convento.

Volvería a la localidad de la que su familia era oriunda, y aun con las amargas expectativas de que su historia diera de qué hablar en el pueblo y alrededores, ella afrontaría los acontecimientos lo mejor que pudiese.

Sor Socorro, pues, aquella misma noche, releyó conmovida la última carta recibida de su amor impenitente, suspiró al fragor de la soledad de su austera celda, y, ya rendida, apagó la luz para dormir las horas posibles que restaban hasta el amanecer.


RELATO POR ENTREGAS

Motivado por razones de interés creativo e innovador, me honro añadir a este mi blog la entrega fraccionada de un relato corto de mi invención, hecho con mucho cariño y mimo, para el disfrute de todo aquél que, visitando esta página, desee leer una historia creativa y gratuita al puro estilo de las entregas periódicas.

Cada domingo, contando desde éste, si no tengo ningún impedimento, publicaré una a una las entregas, pues, de las que consta la historia en cuestión, a la que he titulado Lucía y Ernesto.

Que os sea de provecho.

El Poeta de La Mancha, a 25 de febrero de 2018.



sábado, 24 de febrero de 2018

TORBELLINO



Torbellino multicolor en el centro de mi ego,
remolino arrollador, atrezo de mis sueños.

Diccionario amigo leal, versos largos más o menos,
verborrea espiritual en papeles que deseo.

Concitando expectación el autor se hace pleno,
y así van surgiendo obras en la Tierra in crescendo.

España de Oro, de siglos que lo fueron,
de Calderón de la Barca, o Francisco de Quevedo.

Gramática española, nombres muchos, muchos verbos,
adjetivos, conjunciones, oraciones que leemos.

Formas tantas de aprender, de leerme lo que quiero,
Wikipedia, Internet, prensa, radio, videojuegos.

Miscelánea del saber, de escribirse algo bueno,
o no tanto, yo qué sé, opinable cada memo.

Lengua clara si la mamas desde crío en la escuela,
si la estudias con rigor y defiendes con entrega.

Silogismos, subterfugios, palabrejas raras veo
en el rico castellano, en el texto de enredo.

Torbellino misceláneo en el centro de mi ego,
remolino arrollador de palabras con apego.

El Poeta rebuscando su refugio, su consuelo,
el lector que atento lee cuanto quiere su deseo.

La gramática como base, como ínclito atrezo,
Español de orgullo y clase, castellano de gracejo.

Concitando expectación el autor se hace pleno,
y así con la lectura todo se hace más ameno.

Diccionario amigo leal, versos míos, versos llenos
de la rima singular, torbellino más o menos.