lunes, 26 de abril de 2021

LLENO DE ALEGRÍA

 

Encerrado en mi mente

vago yo inclemente,

solo veo un sino

de estulticia hiriente.

 

Solo yazgo anclado

en el mar presente,

y mi vida expira

para así ya siempre.

 

Solo veo gaviotas

de dispares frentes,

solo veo el suicidio,

aunque no lo intente.

 

Y así pasa un día

para otro enclenque,

donde hace el olvido

que te des de frente.

 

Y a la par tras años

de pasar los meses,

llega un día dado

en que no se crece.

 

Salgo de mi sino

cuando quiero a veces

ver mi alegría

con mayores creces.

 

Solo suelo a veces

ver esta rutina,

escribir en verso,

lleno de alegría.

 

 

LA CALIDAD

 

La calidad en pequeñas dosis, en el tiempo separadas,

deparándonos las dotes, aptitudes consagradas.

 

Calidad al escribir el poema que ansiabas,

esos versos con sus rimas, con su métrica variada.

 

Adalides de trabajos, de las manos artesanas,

esculpiendo las culturas de variantes provincianas.

 

Calidad del vino ardiente, que abrasa como llama,

que llama como abrasa a beberse una garrafa.

 

Calidades tan dispares, tan distintas, buenas, malas,

que aherrojan sentimientos, y se hacen sofisticadas.

 

Calidad que es calidez que es palabra desusada,

acepción tan calurosa como cálida y humana.

 

Calidad de un monumento de una zona inusitada,

de un convento al barlovento en los sueños de pijama.

 

Calidad si escribo esto y no cometo ni una falta,

calidad si tú lees presto y entiendes mis palabras.

 

Calidades diferentes, rimas buenas, rimas malas,

los poemas de los poetas, esos buenos camaradas.

 

Calidad de vida sana, dieta que es mediterránea,

calidad que alcanzable lleva a mejor mañana.

 

Calidad al creerme apto y no mediocre en mi alma,

calidad cuando valoro lo que soy, sano y que ama.

 

Calidad cuando entretejo estos versos de tal gana,

ufanado y optimista, valorando mi mañana.

 

 

UN LIBRO

 

Un libro, cuando lo abres, y te sumerges en sus páginas, entras a formar parte de su ser.

 

Un libro, cuanto más lo lees, más matices y significados le encuentras. Más lo comprendes. Más lo asimilas.

 

Un libro puede ser un compañero en la soledad, un amigo espiritual, un asidero emocional.

 

Tratemos bien a los libros, ellos nos regalarán su sapiencia.

 

Cuantos más libros se leen, mejor se entienden éstos, pues con el tiempo se van comprendiendo mejor los significados que encierran las palabras.

 

Un libro para regalar, para compartir, para escribir, para leer, para soñar.

 

Libros para colorear, para pintar en ellos nuestras situaciones vitales. Libros que van recogiendo nuestros bagajes existenciales.

 

Libros para aprender, que no desaprender, de la vida misma, del carrusel del tira y afloja en nuestros toma y daca como seres humanos.

 

Libros de historia, de ficción, de aventuras, de novelas, policíacos, de variados temas, entramando categorías por las que uno puede sentir predilección.

 

Un libro, en resumen, que en el día del libro, y dedicándole su tiempo, puede ofrecernos más valor y sabiduría si no lo arrinconamos y lo dejamos olvidado el resto del año.

 

 

sábado, 10 de abril de 2021

CON EL ALMA DE HIERRO

 

En marzo de hace un año

un virus vino a vernos;

el COVID ya empezaba

el miedo a meternos.

 

El mundo, alborozado,

no lo estaba previendo,

pillando la pandemia

a grandes y pequeños.

 

Quedamos a la zaga,

Europa en un momento,

la crisis que golpeaba,

el brote ya tremendo.

 

Quedándonos en casa

paliamos los efectos,

mas no curamos mucho

los otros muchos riesgos.

 

Y así con todo vamos

y el año pasa en esto,

con olas virulentas,

tormentas en los puertos.

 

Lavamos nuestras manos,

cuidamos nuestros cuerpos,

mas salimos sin deber

a coger lo que no es nuestro.

 

Es decir, esas algarabías,

desmadres que son ciertos,

las fiestas ilegales

nos dejan más expuestos.

 

Y el virus que no cesa,

las uvi al completo,

el caos en esas camas,

en pasillos ya repletos.

 

Cuidemos la salud

y no salgamos lejos,

insignias que evidencian

cautelas al respecto.

 

Y así con todo vamos

a no ser serios, necios,

saltándonos las normas

del cívico precepto.

 

Vacunas que ya llegan

a darnos fuerza en esto,

el COVID ya se frena

o acelera aún más presto.

 

Mas no tengamos miedo

y vayamos a lo nuestro,

que nada nos detenga,

ni un virus ni un camelo.

 

Mas sí seamos serios

por nosotros, por los nuestros,

cercenando a la pandemia

su tiempo ya molesto.

 

Por eso yo te digo,

oh mundo de este tiempo,

la guardia ahora no bajes,

que ya nos queda menos.

 

Y así con todo vamos

a aguantar, guerreros,

el virus imprevisto

con el alma de hierro.